¿Sabes? Ya estoy harta de muchas cosas. Que me acuerdo de ti todos los días, que te llevo en mi mente y de ahí no sales. Mira, si te voy a ser sincera: Estoy cansada de toda esta mierda. De estar sin ti, de no poder verte. De no saber ni siquiera si estás bien o si estás mal. De pensar si habrás conocido a alguien que te merezca más que yo. Joder, que te echo de menos gilipollas. Ahora pienso en todo lo que viví contigo, en todos nuestros momentos, en las cosas que nos dijimos. Y también en las que no. Porque me arrepiento dr muchas cosas, pero sobre todo me arrepiento de no haberte dicho nunca la verdad. Y la verdad es que cuando me mirabas se me paraba el mundo, que me importabas más que mi propia vida, que tú venías y me sacabas de todas las mierdas. Que tú siempre fuiste mi héroe. Lo que pasa es que por culpa de mi puta timidez lo jodia todo. Y cuando tú me fallabas, ahí siempre estaba mi música para curarme, o a veces para sacarme todas las lágrimas que me había aguantado. Y si no, siempre quedaba mi ídolo, para recordarme que valía la pena seguir adelante, que yo podía, que no estaba sola, que todavía quedaban muchos sueños por cumplir. Y desde aquí le doy las gracias.
"Un concierto es una sucesión de momentos relacionados con la música que no quieres que acaben nunca". Te dije.
Y tú me dijiste:
"Entonces tú y yo también también somos como un concierto"
Sí, tenías razón. La música, los recuerdos, tú el cantante y yo la fan. Y la fecha del concierto, ese número que no se olvida, como nuestro 13.
Y como dice mi ídolo: Tú eres mi gigante y la suerte de mi vida.
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